Una unidad de cuidados intensivos (UCI), unidad de vigilancia intensiva (UVI) o centro de tratamiento intensivo (CTI) es una instalación especial dentro del área hospitalaria que proporciona medicina intensiva. Los pacientes candidatos a entrar en cuidados intensivos son aquellos que tienen alguna condición grave de salud que pone en riesgo la vida y que por tal requieren de una monitorización constante de sus signos vitales y otros parámetros, como el control de líquidos. Muchos hospitales han habilitado áreas de cuidados intensivos para algunas especialidades médicas.
Dependiendo del volumen de pacientes ingresados puede haber varias unidades de cuidados intensivos especializadas en diferentes áreas de la Medicina, como son: Cuidados intensivos cardiológicos o unidad coronaria – Unidad posoperatoria de cirugía cardíaca – Trasplante de órganos – Cuidados intensivos psiquiátricos – Cuidados posoperatorios, aunque la mayoría son unidades de cuidados intensivos polivalentes.
Si la población pediátrica lo justifica, se desarrollan: Unidades de cuidados intensivos pediátricos, que deben diferenciarse de las Unidades neonatales, cuyos pacientes se mueven en un rango estrecho de edad (desde el nacimiento hasta el día 28 de edad) conocido como período neonatal.